INCLUSIÓN ¿FORZADA?
Vivimos en la era de los servicios de “streaming”,me refiero a Netflix, Hulu, Amazon Prime, HBO, y un sinfín de servicios de contenido audiovisual que nos proporcionan también, un sinfín de películas y series que a veces devoramos en cuestión de días. Y se preguntaran “¿Que hay ahí de especial en eso? Sí todos tenemos contratado alguno de estos servicios…”
Pues bien para empezar nos situaremos en la entrega de los Oscars de 2015, donde se generó una gran polémica ya que casi el 90% de los nominados eran blancos y las mujeres quedaban relegadas a las categorías que a ellas se les dedica, como mejor actriz o mejor actriz de reparto. Esto generó un revuelo y la gente criticó los premios de la academia, tachándolos de racistas y de machistas, considerándose por muchos especialistas y críticos de cine como la edición más blanca jamás celebrada.
Esto que os acabo de contar cambiaría “las reglas del juego” poco a poco las nuevas series y en especial las destinadas a servicios de pago, como los antes mencionados , empezaron a escribir papeles y dar el protagonismo a mujeres, afro-americanos y personas del colectivo LGTBIQ+ para convertir estas plataformas en un crisol inclusivo y de tolerancia que jamás antes se había visto.
A menudo esta inclusión en pantalla y especialmente cuando nos referimos al colectivo LGTBIQ+ basa a los personajes enteramente en su orientación sexual e identidad de género dejando de lado aspectos personales como a que se dedican a parte de pertenecer al colectivo LGTBIQ+ y si se nos menciona su profesión se cae en el tópicos que ya aburren, por otra parte y hablando de tópicos ,veremos que jamás habrá un personaje que pertenezca a este colectivo de más de 30 años o que la bisexualidad es tratada como un periodo de transición o confusión.
Ahora… mis preguntas son las siguientes: ¿nos encontramos en un punto en la sociedad donde esta inclusión existe, es real y la vemos reflejada en nuestras pantallas y se consigue con esto dar visibilidad a colectivos que han sido marginados y desfavorecidos a lo largo de la historia del cine y la televisión? o ¿son estos colectivos utilizados por las productoras como un reclamo para “hacer negocio” y obtener el beneplácito de las críticas y los medios especializados? .
(Fotografía de la entrega de los Oscars de 2015)
Jesús Fernández Jiménez
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